FAQ
La mayoría de hombres describirían el largo de su pene como menor de la media, incluso aunque se encuentren dentro de las dimensiones normales según las estadísticas. En nuestra sociedad, el tamaño del pene suele asociarse a valores como la fuerza, la potencia sexual y la masculinidad. Los hombres que no se sienten identificados con esto tienen un problema. Esta autoevaluación, junto con las posibilidades de comparación que hoy día ofrecen la televisión e Internet, puede atraer rápidamente problemas psicológicos.
Este tipo de sufrimiento se ve especialmente marcado si esta evaluación ya se manifiesta durante la adolescencia. Las comparaciones entre amigos de la misma edad son irremediables y no sirven de ayuda. Si a esto se le suman malas experiencias durante la fase de la pubertad, pueden desarrollarse grandes obsesiones. Al llegar a la edad adulta, normalmente solo los hombres con un carácter más fuerte pueden superarlo sin ayuda terapéutica.
El agrandamiento de pene, del tipo que sea, no puede reemplazar en ningún caso la terapia contra enfermedades mentales o psicológicas graves, ya que esto únicamente fomentaría el deseo de aumentar el tamaño del pene. Este tipo de planteamientos únicamente puede considerarse como complemento a la terapia psicológica.
